Hueles a anelos perdidos
Hueles a café de madrugadas compartidas,
a libro viejo que guarda nuestras huellas.
Hueles a tormenta que limpió las aceras,
a tierra mojada donde brotó la espera.
Hueles a puerto con barcos que nunca zarparon,
a melodía que los labios memorizaron.
Hueles a invierno que juró ser eterno,
y a primavera oculta tras el invierno.
Hueles a raíz que el tiempo no desgasta,
a mapa estelar donde nuestro norte basta.
Hueles a promesa escrita en la piel,
a eternidad que eligió quedarse en él.
…Y esa alma que nombras,
lleva tu aroma en cada sombra:
no se suelta
porque ya es casa,
no se olvida
porque ya es brasa.
Una respuesta a «Hueles a anelos perdidos»
-
Al terminar de leer el poema, habla mucho de ti, no te conozco, no se quien eres, pero se que vives la vida como un sueño, porque escribes sin redundancias y con una calidez excepcional.
Te felicito.
Lic. Asucena Diaz.

Responder a Asucena Diaz. Cancelar la respuesta